martes, 11 de marzo de 2008

Desde boedo hasta liverpool

Hoy martes se jugaron dos partidos importantes para las dos competiciones más grandes del fútbol mundial: La Champions League y la copa Libertadores (sin esponsor queda mejor). Repasemos:
De un lado del charco jugó el Liverpool contra el Inter de los argentinos. ¿¿Adivinen quién ganó?? Si, exacto. Este arriesgado cronista estaba en lo cierto. El equipo que pasó a los cuartos de final es el inglés dejando derrotada y abatida a la escuadra italiana. Revisemos un poco lo que pasó: Por un lado, el Inter se jugaba un partido muy difícil, ya que venía de caer 0-2 de visitante. Por otro lado, los del Pupi jugaban en su casa, una localía que de verdad se hizo sentir. Los chiflidos bajan de las gradas cada vez que un inglés tocaba la pelota, algo que realmente los hizo trastabillar los primeros minutos. Los rojos estaban imprecisos, tiraban pelotazos a cualquier lado o regalaban la caprichosa por centavos (en la juerga esto se conoce con la frase de "están cagados"). El Inter apretaba pero pronto se empezaron a ver sus grietas. Por medio de un ataque desordenado y con una destreza propia del Calcio, tiraban pelotazos para que los altotes la bajen a ver qué se puede hacer. Lamenteblemente, con el correr del partido se fueron impacientando más y más hasta que en una jugada muy torpe Burdisso se hizo expulsar. Y ahí se acabó la historia. Al Liverpool se le abrieron los espacios, cosa que fue aprovechada por el niño Torres para marcar el único tanto del partido.
La explicación más favorable para esto es la siguiente: el Inter está poblado de argentinos, lo que hizo helar el cesped, lo que hizo que burdisso se "refale", lo que hizo que se lleve puesto a un rival, lo que hizo que lo rajen a la mierda, lo que hizo que se perdiera el partido. Tampoco le caigamos con todo el rigor al nico que, hasta ese momento, era el único que ponía huevo. Las intervenciones de cambiasso cada vez más frías, las corridas a ningún lado de "loser" Zanneti, los disparos a cualquier lado de Cruz (sin mencionar su cara amarga) y el pésimo fútbol de los demás sudamericanos de esa seleccioncita hicieron que en Milán sólo festejaran los rojinegros. Todos querían hacer el gol maradoniano y así se perdieron cuarenta posibilidade claras que hubieran significado la clasificación. ¿El Liverpool? Ni idea. Salvo Mascherano ese partido no lo jugó nadie. Estaban tan cagados por los chiflidos que se metieron abajo de la mesa, por suerte el Inter se eliminó solito. Para la próxima será muchachos, no pierdan las esperanzas. Hay que hacer limpieza en ese plantel.
Del otro lado el charco jugó el nefasto cuervo (perdón si hiero alguna susceptibilidad). Tenían un partido bravo en la altura contra el Real Portosí, un equipo boliviano que no sólo era boliviano sino que también era malísimo (esta es una combinación que suele ser letal). La averdad que regalar los puntos en la altura es sólo para perdedores. Aquí pasó algo similar al partido de Champions: lo perdieron los bolivianos, no lo ganó Casla. Un partido cocinadísimo (2-0 a favor) se vuelve una pesadilla en los úiltimos 15 minutos. Parecía que los que no tenían piernas eran los del Potosí porque corrían como si tuvieran el culo cagado (es una metáfora, creo). Para destacar queda simplemente la mano de Ramón Díaz, personaje que odio profundamente debido al club al cual suscribo. Todos sus cambios fueron favorables: lo mete a Bilos para que baje todos los pelotazos, lo deja en la cancha a un Romeo que merecía salir y ser acribillado por los goles que se había comido para que ponga el 1-0, lo manda al césped a un juvenil que todavía estoy buscando el nombre y que se encontró con el gol del empate desde el suelo, acertó dejando en el banco al burro de su hijo y lo puso a patear el penal al perro de aureliano Torres, un tipo que todavía no puede creer que haya metido un gol importante en su magra y definitivamente sucia vida. Felicitaciones para el cuervo que aun está vivo en la copa aunque un poco lejos. Es posible que no se clasifique a octavos, asi que pongámosnos a hacer cuernitos.

Aclaración: el penal fue un invento de otra galxia, pero está bien, asi son las cosas.

Futurología: el Liverpool se queda en la próxima rueda y el cuervo se queda en octavos (pero pasan el "grupo e la muerte").

Observación: yo creo que el matador Kempes va borracho a comentar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La cuota xenófoba y despreciable es gentileza de la casa... pero la verdad, me reí. Zarpalata merece una columna en Olé.